Es en Alemania, en los años cincuenta, cuando la geobiologia nació del impulso dado por grandes nombres como el Doctor Hartmann, el profesor Reinhardt Schneider, el profesor Anton Schneider, La Sra. Blanch Mertz y otros.
Al principio, estas personas de ingeniería se habían reunido para estudiar la influencia del medio ambiente sobre el hombre. Su objetivo consistía en desarrollar este concepto intentando al mismo tiempo determinar y nombrar los distintos factores en cuestión. Debemos esencialmente la geobiologia al Dr. Hartmann, descubridor de la famosa "red Hartmann" (denominada "red global"). En 1961 fundó el Forschungskreis (círculo de investigación en geobiologia), un extenso grupo de trabajo, teniendo que tratar distintos temas intensamente, desde la astrología, el médico, el radiestesico pasando por las "ondas nocivas". Se rodea permanentemente de investigaciones actuales. Y consigue suscitar el interés del público, en particular, en sus congresos anuales que se dan en el mes de marzo, abril en Eberbach. Su renombre se considera debido a una cualidad del Dr. Hartmann que supo rodearse de personas competentes en las disciplinas requeridas. Citemos así al Dr. Koenig, un electrotécnico, o el Dr. Varga, un médico biólogo (ejerciendo en el instituto Mc Planck de Friburgo). Pero también de otros, que en el marco de sus investigaciones, supieron aportar su parte, la amplia difusión de su estudio "Wetter - Boden - Mensch" (el tiempo, el suelo y el humano) y, por otra parte, su acción en el extranjero (en Suiza, en Bélgica, en el Canadá, en Austria e incluso en Australia).
Existe otra institución notoria, debida por iniciativa del Dr. Anton Schneider: el Institut de Baubiologie (biología de la construcción). En el se forman a los profesionales de la construccion en las técnicas ecológicas y, sobre todo, en la biología de la construcción (baubiología). Se encuentran los mismos principios básicos que en el Dr. Hartmann: el análisis y el diagnóstico de las perturbaciones medioambientales. Sin embargo, gracias a su colega, Sr. Maes, antiguo periodista reconvertido a la física medioambiental, el instituto del Dr. Anton Schneider ocupa un lugar particular. Se estudia así el aspecto físico, y exclusivamente físico, perturbaciones en la construcción; son enumeradas, designadas, y se miden con aparatos científicos. Se elaboraron algunos protocolos, se prueban algunos aparatos y se estudian algunas normas físico-biológicas. Gracias al aspecto científico de este planteamiento, la biología de la construcción tuvo ecos positivos por todas partes a través del mundo.
Al igual que el Dr. Hartmann, Anton Schneider y Maes supieron rodearse con personas competentes en los distintos ámbitos necesarios para la comprensión de nuestro medioambiente directo que constituye la construcción, sobre todo cuando se desea realizarla de manera sana.
Otro personaje mítico de la geobiologia en Alemania fue el profesor Reinhard Schneider. Físico jubilado, interesado en la antena Lecher (aparato científico de uso sensible). Según este científico, toda materia posee una longitud de onda, una frecuencia y una radiación; ahora bien estas calidades, cuales se miden en espectrometría, pueden también captarse por la antena de Lecher. Recurriendo a este aparato, se pueden analizar las ondas medioambientales presentes en una construcción como en un paisaje arquitectonico en el cual se encuentran objetos o energías. Se debe así al Sr R. Schneider la determinación de un gran número de longitudes de onda vinculadas a los lugares, a la construcción, a la medicina natural, a las distintas piedras (es decir: a todo lo que emite o irradia).
Además de sus contribuciones al manejo de la antena de Lecher (que graduó para que responda a las leyes de la física), se reconoció y aprecio a este investigador sobre todo por sus conocimientos geomanticos (no se trata, aquí, de arte divinatorio sino de la puesta en evidencia de energías irradiadas y vinculados a los detalles constructivos, al paisaje y sobre todo a las construcciones antiguas). Sus seguidores son numerosos en todo el mundo. Con su muerte, ocurrida en 2001, la geobiologia perdió a un radiestesista de enorme valor, un verdadero maestro de esta especialidad y la geomancia.
Una cuarta personalidad cuenta como uno de los pilares de origen de la geobiologia : Sra. Blanc Mertz. Primero fue miembro del círculo de Dr. Hartmann, se separó más tarde para crear al Instituto Chardonne, en Suiza. Física también, frecuentó la misma escuela que el profesor Reinhard S.
Sus libros "Orte der Kraft" ("Lugares de energia") forjo su renombre y su reputación, hay lugares históricos míticos, describiendo sus energías, elementos antes desarrollados y bien conocidos de las antiguas civilizaciones. Muchos arqueólogos sacarían provecho para inspirarse.
El tiempo ha pasado desde estos orígenes y los primeros pasos de estos pioneros.
Pero las tres "escuelas" del geobiologia sensible (Dr. Hartmann), científico (Dr. Anton Schneider - Maes), y geomantica (Dr. R. Schneider) existen siempre y forman aún hoy a sus adeptos y sus discípulos.